Existen leyes que prohíben el uso de la información confidencial cuando se compra, vende o comercializa valores cotizados pública-mente, incluyendo no sólo los valores de Alestra, sino los de las compañías sobre las cuales el empleado pueda, como resultado de sus actividades de negocios, tener información que no sea del dominio público.
La información confidencial incluye, entre otras, toda aquella que no está a disposición del público en general y que puede influir sobre la decisión de un inversionista, cliente o proveedor, sobre la compra, venta o retención de los valores y servicios de nuestra empresa u otros negocios.
Cuando un empleado acepta un trabajo en la empresa, debe firmar una Carta Manifiesto de Conflicto de Intereses y Confidencialidad de Información, con el objeto de que tenga el conocimiento y compromiso de apego a la seguridad que debemos guardar con respecto a la información que recibimos y manejamos por los diferentes medios de comunicación (verbal, escrita o electrónica) que la empresa utilice para mantener la adecuada comunicación con su personal.
Esta Carta Manifiesto es renovada por todo el personal de la empresa cada año, con el objeto de mantener vigente nuestro compromiso a este respecto.
Los empleados que se separan de la empresa, voluntaria o involuntariamente, quedan obligados a no revelar la información confidencial, privilegiada y propia de Alestra a ningún nuevo patrón ni a persona alguna que no haya firmado la Carta Manifiesto con nuestra empresa. Por consiguiente, los ex-empleados no podrán compartir o comercializar esta información en su nuevo empleo o negocio.
La información confidencial y propia de la compañía, a veces denominada "secreto industrial o comercial" o "conocimiento técnico", es la que Alestra ha determinado, a través de su área de Seguridad de Información, que no debe ser revelada a terceros, salvo por requerimiento de ley o según se permita bajo las políticas de la empresa o por razón especificada bajo contrato. Revelarla podría constituirse en desventaja competitiva o financiera para la empresa; bien porque la información pudiese lesionar o desconcertar a los empleados, clientes, proveedores, socios negocio o a la compañía misma; o bien porque la información sea propiedad de terceros y nos hayamos comprometido a mantenerla privada.
De manera enunciativa más no limitativa, la información propia de la compañía incluye:
Investigación y desarrollo, invenciones, patentes y cuadernos de notas de ingeniería y laboratorios.
Dado el valor de la información considerada como confidencial y propietaria de Alestra, no la incluimos en conversaciones familiares ni con amigos, mucho menos con personas desconocidas; tampoco hablamos de ella en lugares públicos ni telefónicamente si no hay seguridad y privacidad; no la transmitimos por fax a un aparato desatendido; no la enviamos por correo electrónico por medios que no sean seguros; y no se la revelamos a compañeros de trabajo, a menos que deban conocerla por motivos del negocio.
Sin excepción, los datos personales que le son confiados a Alestra por cualquier entidad, son tratados con el mayor cuidado, cumpliendo escrupulosamente lo dispuesto en la Ley Federal de Protección de Datos en Poder de los Particulares, haciendo del conocimiento público su política de privacidad a través del aviso de privacidad correspondiente en su sitio de internet.