Las personas con experiencia en computación y ciberseguridad saben de la importancia de los firewalls. Junto con los antivirus y programas antimalware, forman parte de las herramientas que nos protegen de las amenazas que deambulan en el mundo digital. Si bien muchos conocen sobre estas herramientas, poco conocen la interesante historia y beneficios que tienen.

En esta nueva entrada de nuestro blog, te explicaremos qué son, cómo se fueron formando y cuáles son los beneficios de adquirir un firewall para la protección de tu infraestructura digital.

¿Qué es un firewall?

Para los usuarios menos familiarizados con los temas de tecnología, un firewall puede sonar como un sinónimo de antivirus. Si bien es verdad que ambos buscan proteger tus dispositivos de contenidos peligrosos, la gran diferencia es que un virus detecta la presencia de malware, mientras que el firewall impide la entrada de tráfico no deseado, protegiendo la red en dónde se encuentra activado.

Etimológicamente, el concepto de los cortafuegos (firewalls) ya existía. Son muros físicos diseñados específicamente para que, en caso de un incendio, el fuego no se esparza hacia otros edificios o estructuras contiguas; y al llevar al mundo digital este concepto, los firewalls funcionan de una manera muy similar. Estas murallas virtuales evitan que información no deseada entre a una red o computadora.

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Generaciones de firewalls

Hay muchos especialistas en informática que afirman ser creadores del concepto, pero en realidad la idea de los firewalls salió como el resultado de múltiples propuestas para proteger redes computacionales.

Existen tres generaciones de firewalls que con el tiempo han adoptado nuevos mecanismos y estrategias para proteger el tráfico de datos. La primera generación eran capas de protección dentro de una red y se conocían como filtros de paquetes. Estos cortafuegos funcionaban de una manera relativamente simple. El administrador del firewall definía una serie de reglas que debían aplicar para los paquetes de información que entraban o salían de una red, si el paquete no cumplía con esa serie de reglas, el firewall filtraba la información y no los dejaba pasar.

La segunda generación llevó esta tecnología un paso adelante con los filtros de estado. Estos filtros funcionaban de manera similar a la primera generación, pero eran capaces de retener información sobre los paquetes y determinar si dichos paquetes eran parte de una conexión nueva o existente. La tercera generación es conocida como los firewalls de aplicación, los cuales pueden comprender protocolos como HTTP o DNS y determinar si hay intentos para atravesarlos de manera ilegal.

Beneficios de un firewall

Al igual que otras medidas de seguridad, los firewalls forman parte de toda una estrategia de seguridad que las empresas utilizan para protegerse de los peligros digitales. Entre los beneficios más importantes de adquirir un servicio de Firewall se encuentran:

• Protección contra malware, gusanos y ataques disfrazados de hackers.
• Restringe el uso de Internet para bloquear contenidos inapropiados o prohibidos.
• Monitorea la navegación y conserva un registro de las páginas navegadas.
• Evita el acceso remoto no autorizado.
• Permite que tu experiencia de navegar en Internet sea mucho más segura.

En Alestra contamos con las soluciones ideales para protegerte de las amenazas digitales actuales. Una de nuestras soluciones más importantes es el Firewall Administrado, una solución que permite implementar medidas de seguridad perimetral para crear una línea frontal de defensa y mantener tu información y aplicaciones seguras. Visita nuestra página oficial y conoce las soluciones que tenemos para ti.